Pachuca tendrá dos propósitos fundamentales esta noche: tendrá que ganar para obtener su lugar en el grupo siete de la Copa Libertadores pero, al mismo tiempo, deberá procurar no recibir goles que lo puedan complicar más de la cuenta. Pero vayamos por partes.
La derrota en Chile, ante Universidad, no terminó siendo del todo mala, porque los “tuzos” se trajeron un resultado al que pueden revertir en el Estadio Hidalgo. Eso es cierto, pero también lo es que perdieron y, por ende, están obligados a ganar si quieren continuar con vida en la Copa. Y eso conlleva una presión de la que no todos los conjuntos son capaces de superar. Deberá jugar con la tranquilidad de saber que tiene por delante un partido que dura 90 minutos y en cualquiera de ellos puede marcar el gol que, por lo menos, lleve la serie a los penales. Pero si se desespera, si pretende empatar el partido antes de los cinco y marcar el segundo transcurrido el cuarto de hora, estará incurriendo en un error.
Porque, como se dijo líneas arriba, es fundamental ganar. Es la premisa primordial. Pero también es importante mantener el arco en cero porque, ante un gol de los chilenos, Pachuca estará obligado a marcar por lo menos tres. Y ahí sí el partido se hará cuesta arriba, y los minutos parecerán correr alocados. Entonces, el equipo de Enrique Meza tiene que ir a buscar la victoria sin descuidar la parte defensiva, sin dejar espacios ni oportunidades de contragolpe. Deberá rebuscársela para contar siempre, en cada jugada, con más hombres de defensa que atacantes del rival; caso contrario, se verá en un aprieto.
Es importante aclarar que el cotejo, si bien es de Copa y ante un rival tradicional, es sumamente accesible. El resultado se puede remontar sin pasar por momentos traumáticos, pero los “tuzos” deberán jugar con la tranquilidad que el gol puede llegar en cualquier momento. La afición pondrá presión, querrán empardar el partido en la primera jugada, pero no por enceguecerse en ese objetivo se tienen que perder los caminos.
No jugará Leobardo López, por estar en el seleccionado, pero Meza podrá disponer de la base titular, con Damián Álvarez, Jaime Correa, Blas Pérez, Edgar Benítez y Miguel Calero como columna vertebral.
La derrota en Chile, ante Universidad, no terminó siendo del todo mala, porque los “tuzos” se trajeron un resultado al que pueden revertir en el Estadio Hidalgo. Eso es cierto, pero también lo es que perdieron y, por ende, están obligados a ganar si quieren continuar con vida en la Copa. Y eso conlleva una presión de la que no todos los conjuntos son capaces de superar. Deberá jugar con la tranquilidad de saber que tiene por delante un partido que dura 90 minutos y en cualquiera de ellos puede marcar el gol que, por lo menos, lleve la serie a los penales. Pero si se desespera, si pretende empatar el partido antes de los cinco y marcar el segundo transcurrido el cuarto de hora, estará incurriendo en un error.
Porque, como se dijo líneas arriba, es fundamental ganar. Es la premisa primordial. Pero también es importante mantener el arco en cero porque, ante un gol de los chilenos, Pachuca estará obligado a marcar por lo menos tres. Y ahí sí el partido se hará cuesta arriba, y los minutos parecerán correr alocados. Entonces, el equipo de Enrique Meza tiene que ir a buscar la victoria sin descuidar la parte defensiva, sin dejar espacios ni oportunidades de contragolpe. Deberá rebuscársela para contar siempre, en cada jugada, con más hombres de defensa que atacantes del rival; caso contrario, se verá en un aprieto.
Es importante aclarar que el cotejo, si bien es de Copa y ante un rival tradicional, es sumamente accesible. El resultado se puede remontar sin pasar por momentos traumáticos, pero los “tuzos” deberán jugar con la tranquilidad que el gol puede llegar en cualquier momento. La afición pondrá presión, querrán empardar el partido en la primera jugada, pero no por enceguecerse en ese objetivo se tienen que perder los caminos.
No jugará Leobardo López, por estar en el seleccionado, pero Meza podrá disponer de la base titular, con Damián Álvarez, Jaime Correa, Blas Pérez, Edgar Benítez y Miguel Calero como columna vertebral.
El árbitro será el ecuatoriano Alfredo Intriago.
Nicolás Fábrega
buena nota
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